El domingo 28 de agosto recibimos un caso conmovedor en la vete. Fernanda, una vecina, encontró a una gatita en la calle la que llamó su atención por tener el abdomen demasiado inflamado. Sin dudarlo se acercó a la veterinaria donde hicimos las observaciones correspondientes. La gran sorpresa que nos llevamos fue ver a través de la ecografía que la minina lleva en su pancita dulces bebitos.
Queremos felicitar nuevamente a la mamá gatuna y a Fernanda, quien con amor y hospitalidad cuidó y va a cuidar a su nueva amiga.